Muchas veces, cuando decides realizar ejercicio, es bueno buscar asesoría sobre los ejercicios y rutinas que deberías realizar. Aquí entra la labor del entrenador personal, quien no sólo te puede ayudar a diseñar un buen plan para ejercitarte, sino también te puede asistir a la hora de ejecutar este.
Un buen entrenador es aquél quien te da un gran apoyo, consejos y rutinas acerca de los ejercicios más adecuados para ti. Pero tienes que tener en cuenta que también debes poner de tu parte, y aunque puedas encontrar un entrenamiento personalizado, está en ti asumir la intensidad y ganas en este, además de construir una buena relación con él.
Es por eso que aquí te contamos como establecer una buena relación con tu entrenador y así no sólo realizar en buena compañía y de manera eficiente tu rutina de gimnasio, sino también ganar un amigo y un aliado para toda tu actividad física.
– Primero: entiende que el entrenador es también un ser humano y que está cumpliendo con su trabajo al ayudarte. Así que mantén con él una relación de respeto, como maestro y alumno, y quizá incluso se puedan hacer amigos. Sé también amable con él, no faltes a tus sesiones ni le lleves la contraria.
– Ten claro que quieres hacer para tus ejercicios: Quieres una rutina para bajar de peso, o fortalecer tus brazos o piernas. Si no sabes qué quieres conseguir, entonces el entrenador no podrá ayudarte de la manera adecuada. Él sabe bien que es lo que te conviene, según tus necesidades, y te dará la mejor guía y consejos a la hora de comenzar tu actividad física. Establezcan juntos un plan claro de ejercicios y apéguense a él lo que más puedan.
– No desesperes si no ves resultados: A corto plazo no verás milagros en tu rutina para adelgazar, ni verás músculos marcados de la noche a la mañana. Tu entrenador tampoco tiene la culpa, así que no lo acuses. Comprometerse con un plan de ejercicios es comprender que necesitas hacer ejercicios duros, mejorar tu alimentación y aumentar gradualmente la intensidad. Continúa el ritmo y verás poco a poco los resultados.
– Por último: diviértanse y no tengan miedo, que la risa y el buen ambiente sean parte también de tus entrenamientos personalizados. Pasen un buen rato y no le teman a la conversación o los chistes, y comiencen a crear un buen ambiente. Esto es bueno para no sólo elevar la confianza, sino ser capaces de ver resultados y querer arriesgarse a más. Las pesas son divertidas, pero por qué no intentar algo diferente, como un entrenamiento TRX. Que esa buena energía sea parte de esa relación y ganas a intentar nuevas cosas.
Por último, no siempre ejercitarse solo es buena idea. Déjate asesorar por un buen entrenador y quizá hayas comenzado a pavimentar la vía a una nueva amistad. En Hard Body puedes encontrar el mejor apoyo para tus rutinas, según tus necesidades, de la mano de profesionales que te brindarán el mejor consejo para tu actividad física. ¡Pierde esos miedos y ven a divertirte mientras haces actividad física con nosotros!
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